La percusionista búlgara Vassilena Serafimova debutará en el Festival Paax GNP, con un concierto al lado del pianista y compositor francés Thomas Enhco
Existe una relación espiritual, casi metafísica, entre la percusionista búlgara Vassilena Serafimova y la marimba, instrumento que le ha valido varios premios internacionales como el primer premio del Quinto Concurso Mundial Internacional de Marimba, en Stuttgart.
Así lo detalla en entrevista mientras alista su debut en el Festival Paax GNP, programado para mañana, a las 18:00 horas, al lado del pianista y compositor francés Thomas Enhco, donde interpretarán un repertorio clásico.
Considerada como una de las máximas exponentes de las percusiones en Europa, Serafimova habla de su conexión con su instrumento y del programa Bach Mirror, que creó, junto con Thomas Enhco, a partir de una obra de J.S. Bach, de la improvisación y del folclor búlgaro, mostrando las posibilidades del cruce entre el piano y la marimba, que llevarán al escenario el miércoles 25 de junio, a las 22:00 horas.
“Siento que en una vida pasada ya estaba casada con la marimba, ¿sabes? Nací en una familia de músicos. Mi padre era percusionista y fue mi maestro de los siete a los 12 años. Sin embargo, aprendí marimba sin tener un maestro específico de marimba, solo de percusión. Siempre sentí que este instrumento estaba hecho para mí, y yo para él. Pude entenderme con él, incluso sin un maestro. No sé cómo explicarlo… me fue fácil conectarme con la marimba y poder tocarla”, dice.
Más adelante, Serafimova ganó el Primer Premio en la Quinta Competencia Internacional de Marimba en Stuttgart. “Nunca tuve un maestro de marimba, pero yo sentía una conexión natural con mi instrumento”.
¿Cómo involucró el baile y la danza con su instrumento? “Cuando era más joven, en Bulgaria, solía quedarme quieta frente al instrumento. Luego descubrí que el movimiento cambia la forma en que toco con las baquetas: cambia el color del sonido.
“Por ejemplo, si estoy de puntillas, los sonidos son más transparentes, más etéreos; si estoy un poco agachada, tengo más peso y el sonido es más profundo y con energía. Para mí, el movimiento está conectado con la dinámica y los colores que quiero transmitir con el instrumento. Por eso me muevo tanto, pero no lo pienso. Me nace de forma natural”, explica.
¿Ha tenido alguna relación con músicos mexicanos que tocan la marimba? “Vi algunos mariachis cuando estuve en la Ciudad de México, pero no he podido ver a marimbistas mexicanos. También pude ver a músicos tocando las maracas, porque ahora trabajo en una pieza para maracas y electrónica que se llamará Temazcal. He estado investigando. Espero que esta vez pueda ver a algún marimbista mexicano”.
¿Qué tanta improvisación hay en su trabajo? “Hay mucha improvisación. Toco la marimba a partir de un equilibrio entre la música que está en la partitura y la improvisación libre, donde el sonido me guía y me lleva a otro lugar. Siempre dejo abierto ese espacio para explorar”.
¿De la improvisación nació Bach Mirror? “Sí, claro. Aunque no venimos de la misma cultura. Thomas tiene una formación clásica y tradicional, pero sí podemos encontrarnos en un punto medio gracias a este deseo de improvisar”.
¿Cómo describiría su búsqueda en el escenario? “Lo primero que busco es la felicidad de encontrarnos a través de la música, el alivio y la paz que eso puede darnos. Para nosotros, como músicos, es un momento de profunda concentración y, en mi caso, lo veo como un nivel altísimo de meditación.
“Creo que a través de la música y del sonido, podemos hacer que la gente se sienta mejor, que olvide sus problemas y las dificultades para pensar en algo más bello. Mi idea es tratar de llevarnos, a músicos y oyentes, a un nivel más alto de existencia compartida”.
¿Cuál será su próximo proyecto con Thomas Encho? “Nuestro siguiente proyecto se materializará el próximo año. Me siento honrada y feliz de haber sido invitada a una serie de conciertos con la Filarmónica de París. El primero será el 29 de mayo de 2026 con una productora de música electrónica; invitaremos a cantantes tradicionales de Bulgaria. Será un proyecto nuevo.
“El segundo concierto será con Thomas, el 30 de mayo. Aún no sabemos qué vamos a tocar, pero será una continuación de Bach Mirror, porque queremos volver a la idea de nuestro primer álbum. Será el segundo volumen, donde elegiremos compositores, haremos arreglos, crearemos piezas, improvisaremos y tomaremos fragmentos de la música clásica, tradicional y del pop para mezclarlas a nuestra manera. La música todavía no está escrita, pero pronto empezaremos a trabajar en ello. Espero que ese mismo proyecto podamos traerlo al Festival Paax GNP”, concluye.
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