El consumo en México muestra signos de debilidad, principalmente en el sureste del país, según Chedraui. La empresa prevé recuperación en 2025 pese a retos.
Grupo Comercial Chedraui confirmó que el consumo en México está atravesando un periodo de debilidad, con una afectación más evidente en la región sureste del país. Así lo afirmó Antonio Chedraui, director general de la cadena, en entrevista con El Economista, al explicar que esta caída se relaciona con el término de grandes proyectos como el Tren Maya y la refinería de Dos Bocas, que antes mantenían activa la economía local.
“Estamos viendo un debilitamiento del consumo en México, particularmente en la región sureste debido principalmente a la mezcla de pagos y a la base creada en los años anteriores también por inversiones en obras”, señaló.
¿Por qué bajó el consumo en los mexicanos?
Uno de los retos que ha impactado a la operación es el aumento al salario mínimo, que desde enero de 2025 se incrementó 12%. Esto ha elevado sus costos operativos: tan solo en el segundo trimestre del año, los gastos operativos (sin considerar depreciación) crecieron 12.4%, alcanzando los 11,282 millones de pesos.
Aunque el panorama económico luce complicado, Chedraui destacó que la empresa ha logrado aumentar su participación en el mercado mexicano por 20 trimestres consecutivos, superando incluso el crecimiento promedio del sector. En ventas mismas tiendas, la cadena reportó un alza de 3.7%, por encima del 2.5% registrado por los afiliados a la ANTAD.
El plan de expansión no se detiene. Para este año, la empresa proyecta abrir 130 tiendas en todo México. Actualmente, la cadena cuenta con 586 unidades operativas en el país.
Ingreso de los hogares mexicanos subió, pero sigue la desigualdad
Según datos recientes del INEGI, el ingreso promedio mensual de los hogares en 2024 fue de 25,955 pesos, un incremento del 10.6% respecto a 2022. Sin embargo, el sureste sigue siendo la región con menores ingresos: Chiapas, Oaxaca y Guerrero reportan los ingresos más bajos del país.
El informe también destaca que la desigualdad persiste: el 10% de los hogares con mayores ingresos gana 14 veces más que el 10% con menores recursos. Aunque el coeficiente de Gini (que mide la desigualdad) mejoró ligeramente a 0.391, México sigue siendo uno de los países con alta concentración del ingreso.